Con la mirada caída ( Extracto de Un diario a secreto)

Ñ

Soy Débil, muy débil, mis manos duras, ya no son tan duras, se vuelven suaves, decaída, perdida entre lo que muestro y la razón, escondida entre el orgullo y la incertidumbre, con la mirada caída y el corazón palpitante gritando, pensando en ti, pensando en mi.

Lo tengo todo, mientras no tengo nada, la mente llena y el corazón vacío, la mirada fija en la nada, ojos puestos en la ventana, sueños cumpliéndose y sentimientos desvaneciéndose, quiero y no quiero estar, vuelo lejos, donde no me ves, donde nadie me ve, donde me escondo del mundo y el mal, donde mi sentido y razón se pierden, quiero y no quiero estar dónde todos están, donde tú estás. 

Nunca pensé que fuese cierto aquello que en una habitación con más de cuatro paredes me dijeron, teniéndolos a todos, puedes no tener a nadie, la soledad está y no sé veía ni cercana, oculta tras la sombra de los recuerdos vacíos y la dicha o desdicha de dar por hecho la vida. 

Alejada del camino, encerrada en omisos, no se nota la falta de tu presencia, alguien se va y que se queda, la soledad, Tú soledad.  Ya lo has hecho todo, los has ganado a todos, no has perdido a nadie, pero no hay nadie, todos están, pero estás sola, no quieres querer, ya no lo sabes hacer, con la mirada caída, estás, pero no estás, perdida, oculta, ¿dónde estás?